¿Uso Linux por comodidad o por filosofía?

Salí a tomar aire y quiero que nos pongamos a filosofar.

En el artículo anterior sobre el software privativo me terminé de dar cuenta de que hay dos grupos claramente diferenciados entre los usuarios de GNU/Linux.

1.- Los que usan Linux porque es mejor que Windows.
2.- Los que usan Linux porque quieren ser “libres”.

Me quedo con dos comentarios sobre el artículo anterior en Menéame:

Para muchos de los que usamos linux por su enorme valor de uso, sí. Para muchos de los que usan linux por su valor ideológico, no.

Ya vemos, el valor ideológico de este sistema operativo está forjado sobre los hombros de Richard Stallman y la gente de GNU. Me decía esty “A este tipo no le importa que [el software] sea usable”, Stallman le diría probablemente que sí, que eso que piensa de él es verdad.

Sé que algunos matizarán diciendo que no están en ningún extremo, pero sé que muchos de nuestros lectores usan flash y el driver privativo (de Nvidia o de la marca que sea) para el controlador de video a regaña dientes, lo usan porque no se sienten tan fuertes como Stallman pero si les dieran algo más de usabilidad se quedarían con un PC 100% libre. Para mi ellos son tan parte del grupo “2″ como los que ya tienen el PC libre.

Por otro lado la gente práctica, esa que prefiere Ubuntu u OpenSuSE y no le importan las exigencias morales de GNU, les importa más que su PC no se caiga, no tener virus y estar cómodos. También actúan bajo un influjo ideológico pero ya no el de GNU, sino el de Linus.

Otro comentarista, Nacho en LXA! lo interpreta inseguro y con dislexia pero con la intención correcta:

“Igual suena extraño, pero creo que muchos de los que usamos linux somos en una o cierta forma ideólogos del sorfware libre. Y eso se nota.”

Esto sumado a que los linuxeros, en mi opinión, tienen mucho más que decir de Linux, que un windowsuario de Windows, me lleva a pensar que quizás seamos todos ideólogos del software libre, algunos del Ku Tux Klan stallmanistas, otros torvaldistas.

No se trata de la lucha del bien contra el mal, son opciones igualmente válidas pero que chocan entre sí.

¿En qué bando estás? No vale decir “en ninguno” o “al medio”.

Este artículo no ha terminado, pero yo he concluido con mi parte, sigan escribiéndolo ustedes hasta donde lleguen… (en los comentarios o en un artículo en sus blogs)