El guardián de la red: ¿Cómo evitar el fraude en el pago por click?

La posibilidad de fraude en el sector de la publicidad digital es una realidad que afecta al mercado. A medida que las empresas invierten en tecnología y capital humano para aumentar su seguridad y evitarlo, en el polo opuesto, otros actores del mundo online invierten para seguir siendo fraudulentos.

_{Lorena Martín de Argenta Comunicación}

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Resumen:
Muchas empresas y usuarios eligen la red para promocionarse, por su capacidad de impacto, su difusión y accesibilidad y sus resultados. Sin embargo, ¿esos resultados son siempre fiables?

Uno de los modelos publicitarios más comunes y más rentables en Internet es el “pago por click”, muy eficaz para el anunciante ya que paga únicamente cuando un usuario accede a su anuncio y visita su página web. Para el soporte (el site donde se encuentra ubicado ese anuncio), este modelo también es una fuente de ingresos importante.

Por esta razón, se pueden registrar fraudes en el “pago por click” cuando un usuario o una entidad, a través de un código automático o un programa informático, simula el acceso —el click— sobre un anuncio promocional o publicitario sin tener un interés real en él. El objetivo es simplemente contabilizarlo y lucrarse de forma ilegítima.

Pero este riesgo, aunque existe, ¿es controlable y se puede evitar? Si el fraude es cada vez más común, las formas de detectarlo son también más sofisticadas. La plataforma de affilinet (que controla y gestiona los acuerdos entre anunciantes y soportes), por ejemplo, cuenta con filtros que identifican de dónde procede el click, controlando las URL que generan tráfico y visitas. Primero se analizan los soportes manualmente comprobando su calidad y veracidad; a partir de ahí, se aplican filtros técnicos que detectan cuando algo se sale de la norma.

Este tipo de herramientas cuentan con categorizaciones de la red tanto por el tipo de actividad como por temática y, junto a esta variable —dependiendo de los objetivos del anunciante y la modalidad del soporte— se aplican unos filtros u otros que salvaguardan el sistema de todo fraude.

Otro factor clave es la formación. Los gestores de cuentas velan por los intereses de los clientes, ya sean anunciantes, agencias o soportes. El equipo se encarga de revisar los cambios en las cuentas, de realizar seguimientos de los soportes y vigilar el sistema de alertas que avisa cuando se registra un movimiento inusual.

En este sentido, la opinión de los especialistas es unánime sobre cómo hay que actuar. Cristina Berzal, responsable de affilinet en España, afirma: “Sabemos que hay posibilidades de fraude, pero estamos preparados. Nuestro objetivo es vigilar y anticiparnos a esta realidad, contar con las últimas tecnologías y garantizar la transparencia”.

Las consecuencias económicas para el anunciantes están directamente relacionadas con el volumen de clicks fraudulentos; a mayor cantidad, mayores pérdidas. Sin embargo, hay que hacer una distinción. Un click de baja calidad —es decir, un usuario que no entra dentro del público objetivo en ese momento para el anunciante— no es sinónimo de fraude. Es importante ser precisos en este punto.

En cualquier caso, las empresas, los anunciantes y los intermediarios deben contar con las últimas tecnologías no sólo en sus aplicaciones y programas sino en seguridad para poder anticiparse a estos fraudes que se dan en la red.